Hoy os presento una receta un poco raruna para mi blog. Rara por que es japonesa. Nunca he estado en Japón y no conozco demasiado bien su cocina, y algunos recordaréis mi fracaso con el curry nipón hace ya algunos años. Desde entonces no me había atrevido con ninguna de sus recetas hasta hoy. Pero este plato me encanta. Son esos guisos que se hacen lentamente, donde todos los ingredientes están tiernos y sabrosos. De los que apetece acompañar con mucho arroz, algún encurtido y una cervecita muy fría.
El “Nikujaga” es un guiso de ternera considerado un plato nacional en Japón. Sus orígenes fueron más bien humildes, ya que nació como “rancho”, barato y fácil, para los soldados de la marina imperial.
Hoy en día es considerado comida casera, “comfort food” de madres. Se suele preparar con ternera, y a veces cerdo, laminado muy finamente o incluso picado. La carne se cocina con patatas, zanahorias y cebollas, y se sazona con sake, salsa de soja, azúcar y mirim. El mirim es un vino de arroz dulce con muy poco contenido alcohólico. Todos los ingredientes los podéis encontrar en los supermercados asiáticos. Eso si, si no quieres perder un riñón yo te recomendaría que no los compraras en ninguna tienda japonesa…
La primera vez que comí «Nikujaga» estaba en Colombo en una fiesta de unos amigos. Lo preparó una chica llamada Siseko. Lo curioso del caso es que su receta se preparaba con costillas de cerdo y la salsa solo con agua, salsa de soja y coca cola…
Ah, no olvides poner algún encurtido para darle fuerza al guiso, que es dulzón. Yo lo comí con uno de daikon. Los japoneses también lo acompañan con sopa de miso.
!Disfruta¡
Ingredientes;
1 taco de unos 200 gr. de carne de ternera
1 patata mediana de unos 250 gr.
1 zanahoria de unos 150 gr.
1 cebolla pequeña de unos 100 gr.
1 cucharada de aceite
300 ml. de agua
1 cebolleta china troceada
1 y 1/2 cucharadas de salsa de soja
1 cucharada de mirim
1 cucharada de sake
1 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de sal
Pimienta negra
Preparación;
Pela y trocea las patatas, zanahorias y cebollas.
Introduce la carne de ternera en el congelador durante 1 hora. Sácala y córtala lo más finamente posible.
En una cazuela calienta el aceite. Saltea la carne hasta que este ligeramente dorada. Añade las patatas, zanahorias y cebollas y mezcla bien.
Sala y moja con el agua. Tapa y deja cocer a fuego suave unos 20 minutos.
Añade la sazón y la cebolleta y vuelve a dejar tapado al fuego durante otros 15 minutos.
Al final rectifica la sazón y añade pimienta negra molida. Deja fuera del fuego tapado unos 10 minutos más, para que repose y los vegetales se infusionen bien con la salsa.
Come con mucho arroz hervido y algún encurtido ácido y picante.